José Guadalupe Díaz Nieto, ícono del arte mexicano
Desde su juventud, el profesor José Guadalupe Díaz
Nieto se interesó principalmente en el dibujo artístico, pero su
inquietud por aprender cosas nuevas lo llevó a realizar estatuillas de
alambre cubiertas con papel. Luego de dominar este método, se le
presentó la oportunidad de construir un importante monumento, pues el
escultor asignado a su construcción no se presentó y él se ofreció a
realizarlo.
Sin alguna experiencia previa en este tipo de
actividades, echo mano de la técnica con la que moldeaba figuras de
papel. Construyó un esqueleto de alambres que recubrió con cemento
vertido en moldes que él mismo ideó, y para dar más realismo a la obra,
pidió el apoyo a seis alumnos del colegio militar, pues se trataba del
monumento a los Niños Héroes. Su trabajo fue tan bueno que más tarde fue
llamado a realizar obras como ‘El papelerito’, ‘Busto de Benito
Juárez’, ‘Monumento a Emiliano Zapata’, entre otras.
En entrevista comentó también que durante algún
tiempo tuvo un puesto en la antigua Escuela de Mejoramiento Social para
Menores que se encontraba en las actuales instalaciones del ITCJ. Fue
entonces cuando propuso que se impartieran talleres de artes y oficios a
los jóvenes internos para que aprovecharan al máximo su estancia, pero
esta tentativa no se llevó a cabo. Cuando se iniciaron las
construcciones del Instituto Tecnológico, volvió a replantear su idea y
exhortó a crear un taller donde los futuros alumnos aprendieran dibujo y
escultura. Esta vez su propuesta fue tomada en cuenta, pero se disputó
el puesto con otro instructor, mismo que finalmente se quedó con la
plaza. No fue sino hasta el año 1980 que llamaron al maestro Díaz para
reemplazar al titular del puesto. A partir de ese momento ha compartido
su peculiar técnica de moldeo conocida como “engrupel”, pues el
engrudo y el papel son las materias primas que se utilizan. Asimismo,
el profesor también imparte la materia de dibujo artístico a sus
pupilos.
Cuando un nuevo estudiante le pregunta cual clase
debería tomar entre las opciones que ofrece (dibujo o escultura), él le
responde que ambas se complementan, pues “el dibujo es la base para
iniciar una escultura, una escultura de “engrupel” es una
representación de un dibujo en tercera dimensión”. Hace algunos años,
este artista local creó un manual en el que se instruye a los lectores
respecto a su técnica de escultura, para que cualquier persona, sea
alumno o no del ITCJ, también la pueda aprender. Actualmente se
encuentra desarrollando un libro en el que comparte sus conocimientos en
el arte del dibujo y sin lugar a dudas aseguró que “está mejor que el
de escultura”, mencionó.
Tomado de:
http://alexolvera.wordpress.com/2013/03/24/jos-guadalupe-daz-nieto-cono-de-nuestro-arte/